Un Ex-Libris es un identificativo que se pone a un libro para indicar quién es su propietario. Normalmente se trata de un sello que, a parte de plasmar el nombre de la persona, tiene un diseño que denota los gustos o alguna característica muy concreta de su persona. Antiguamente se trataba de diseños heráldicos que con el tiempo fueron sustituidos por alegorías y símbolos. Actualmente lo más común es encontrarlo en libros de bibliotecas o colegios aunque hay muchísima gente que los utiliza.
Tras volverse de New York, Lovecraft trabajó en la revisión del relato Dos Botellas Negras de W.B. Talman. Aunque el relato fue aceptado y publicado en Weird Tales en 1927, Talman no había quedado contento con los cambios que Lovecraft había hecho así que decidió "vengarse". Le hizo otro encargo y le convenció de trabajar gratis; como tenía habilidad para el dibujo y la genealogía se ofreció a hacerle un ex libris sin cobrarle más que el coste de los materiales. A Lovecraft le gustó la idea pues, que él supiera, nadie en su familia había tenido uno antes. Tras debatir largamente entre si escoger un grabado del Providence Colonial o un Escudo de Armas Lovecraft se decantó por el primero. Recibío su ex libris en 1929 el cual representaba una típica puerta colonial a medio abrir coronada por una cristalera en abanico; su nombre venía incluido en la esquina inferior.
Durante todo el tiempo empleado en el nuevo encargo Talman no hacía más que criticar el texto, sin embargo a Lovecraft no le molestó pues encontró en él una manera de aislarse de ciertas responsabilidades personales que tenía en aquel momento.
La resultante de aquel encargo fue el ensayo Some Dutch Footprints in New England (1933) el cual hablaba sobre la presencia holandesa en los primeros años coloniales. Fue publicado en De Halve Maen que era el periódico oficial de la Sociedad Holandesa convirtiéndose así en uno de sus pocos trabajos publicados fuera de medios amateurs.
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